RENAP CELEBRA Y FOMENTA LA IDENTIDAD DESDE LA NIÑEZ

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La Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó en 1954 el Día Universal del Niño, el cual se celebra en Guatemala el 1 de octubre, festividad que tiene como objetivo recordar que los derechos de los menores de edad deben respetarse. El personal del Registro Nacional de las Personas con motivo de Día del Niño, llevó a cabo una serie de actividades para celebrar y fomentar la identidad de la niñez. Varias Direcciones de la Institución colaboraron para que este día fuera mucho más especial para cada niño que visito la Sede Central. Los menores de edad, plasmaron su creatividad y espontaneidad en el Mural de la Identidad, en el cual por medio de sus huellitas realizaron diversos dibujos que representan su identidad. Asimismo, la colaboración de varios trabajadores de la Institución se hizo ver, ya que varios de ellos de manera proactiva se disfrazaron de varios personajes animados para darle un toque especial a este día. Las actividades no terminaron ahí, cada menor de edad que se acercó fue recibido no solo con una sonrisa, sino además, con una pequeña refacción, pintacaritas, gorros y globos. El Director Ejecutivo, el licenciado Rudy Leonel Gallardo Rosales, “manifestó que el tema principal para el RENAP es la identificación, pero sobre todo se debe trabajar sobre la identidad. Esta escrito que debemos ser como niños, tenemos que tener sueños, tenemos que ser sencillos y tenemos que ser agradecidos. Estamos llamados a ser a así, pero sobre todo tenemos que soñar, y es algo que nunca debemos perder, no importa la edad que tengamos, debemos tener la capacidad de seguir ilusionándonos, la capacidad de seguir soñando, amando y eso es algo que compartimos hoy en este día de los niños y las niñas, es lo que nos inspira como los adultos; buscar ser mejores personas”. Por último recalcó que una persona que tiene identidad, es una persona puede encontrar su propósito en la vida. ¿Y tú ya celebraste el Día del Niño?... ¿Cómo lo puedes celebrar? Comparte con tus hijos, hermanos, sobrinos, primos, cuídalos, abrázalos y diles lo mucho que los quieres. Piensa como adulto. Vive como joven. Aconseja como anciano, pero nunca dejes de soñar como niño.